Los 5 peores alimentos para tu cerebro, según una nutricionista de Harvard
Fuente del artículo: Alimente+/ Foto: Freepik / Autor: María del Pilar Díaz
En nuestro día a día consumimos diferentes alimentos que, a la larga y sin darnos cuenta, nos hacen daño y perjudican nuestro desarrollo cognitivo
Cada vez nos preocupamos más por cómo los alimentos afectan a nuestra salud, especialmente si queremos prevenir enfermedades como la obesidad, la diabetes, la hipertensión o el colesterol alto. Pero todavía no estamos tan concienciados con la salud cerebral como a los neurólogos les gustaría, y la alimentación también juega un importante papel a la hora de mantener en forma nuestro cerebro y nuestra salud mental.
La doctora Uma Naidoo, psiquiatra nutricional de Harvard, estudia cómo los cambios en la dieta pueden mejorar nuestro estado de ánimo y nuestro bienestar mental. Como comparte en un artículo para la CNBC, hay alimentos que promueven la salud cerebral, como las verduras de hoja verde, las frutas, los mariscos y los frutos secos. Pero también hay alimentos que juegan en contra de nuestro cerebro, y que debemos evitar si queremos mantener “la memoria y la concentración nítidas”.
Evita los alimentos con aceites procesados
Naidoo explica que los aceites de semillas altamente procesados, como el de soja, maíz, colza, girasol, algodón o cártamo, “contienen una gran cantidad de ácidos grasos omega-6”. Un consumo excesivo de omega-6 hace que nuestro cuerpo genere sustancias químicas que provocan inflamación cerebral. En su lugar, Naidoo recomienda emplear aceite de oliva virgen extra, aceite de coco o de aguacate.
Cuidado con los alimentos con azúcar refinado
Los alimentos con azúcares añadidos y refinados son un enemigo para nuestro cerebro. Aunque el cerebro necesita glucosa para funcionar, un exceso “puede causar problemas de memoria y menor plasticidad del hipocampo, la parte del cerebro que controla la memoria”, explica Naidoo. Recomienda poner especial atención a los alimentos con azúcares ocultos, como las salsas o las sopas de sobre.
La OMS recomienda reducir los azúcares a menos del 10% de las calorías del día
Productos ultraprocesados con moderación
Con el ajetreo de la vida diaria es normal que acudamos de vez en cuando a algún alimento ultraprocesado para sustituir una cena o una comida. Un exceso de estos alimentos “puede ponerte en riesgo de tener telómeros más cortos, o la ‘capa’ de nuestro ADN”, afirma Naidoo.
Unos telómeros más largos promueven el envejecimiento celular saludable, pero acortarlos significa “que corremos el riesgo de sufrir enfermedades degenerativas en una etapa más temprana de la vida”. A su vez, Naidoo afirma que los alimentos ultraprocesados se han relacionado con mayor posibilidad de padecer depresión. Su consejo en estos casos es: “si no puedes pronunciar un ingrediente o no tienes idea de qué es, es mejor evitarlo”.
Cuidado también con los edulcorantes
En nuestro afán por evitar los azúcares añadidos y procesados, podemos caer en un consumo excesivo de edulcorantes artificiales, ya sea deliberadamente al usar edulcorantes como sustitutos del azúcar, o indirectamente con alimentos light o sin azúcar añadido.
“Cuando usas edulcorantes artificiales que no tienen valor nutricional, pueden aumentar las bacterias intestinales ‘malas’ que pueden afectar negativamente tu estado de ánimo”, afirma Naidoo. Entre los edulcorantes a evitar están la sacarina, sucralosa, stevia y aspartamo. Este último también ha sido relacionado con episodios de ansiedad y con oxidación celular, “aumentando los radicales libres dañinos en el cerebro”.
Evita los fritos
Los alimentos fritos en aceite son muy habituales en nuestras dietas, porque son fáciles de preparar y muy sabrosos, pero pueden ser perjudiciales para nuestro cerebro. Un estudio de más de 18.000 personas publicado en Cambridge relacionó las dietas ricas en alimentos fritos con puntuaciones más bajas de memoria y cognición. Como alternativa, Naidoo recomienda preparar los alimentos en el horno, con airfryer o al vapor.